Primero que nada, antes de sumergirte en el nuevo idioma, debes pensar en tu motivación. Recuérdate la razón por la que quieres aprender inglés. Esto puede parecer obvio, pero te puede ayudar a no perder el incentivo por el lenguaje, ya que al tener en mente el porque de tu esfuerzo te servirá para que no abandones tu meta.
Una forma de poder mantener tu motivación en la mente, es crear un listado de todas las razones que se te puedan ocurrir y mantenerlas en un lugar donde las veas a menudo, así la puedes usar si estás en duda de tu decisión de aprender inglés. Esto es especialmente importante para estudiantes que aprenden por sí solos, por lo cual lo aconsejo enormemente.